Aunque esta misma semana se debatió una iniciativa del PSOE para que se adaptara el periodo de vacunación a los nuevos estudios epidemiológicos, el PP y el PAR rechazaron apoyarla. Hay un malestar muy extendido entre los cazadores aragoneses, que han solicitado en más de una ocasión que se admita esta demanda y acabar con el agravio comparativo. Se da otra circunstancia: en muchos casos, los perros de uno y otro lado cruzan los límites administrativos y mientras los de propietarios aragoneses pueden verse sometidos a una sanción, los de otras comunidades no.
También abundan las cacerías, en especial en Huesca, a las que asisten muchos cazadores vascos, que también están exentos de poner estas vacunas anualmente. La vacuna de la rabia en la especie canina es obligatoria en Aragón en virtud de la Orden de 6 de junio del 2006 del Departamento de Agricultura y Alimentación. En la campaña de vacunación del 2011 se vacunaron 96.511 perros en todo Aragón. Del total, de la provincia de Zaragoza se vacunaron 57.298 perros, en Teruel 18.315 y en Huesca, 20.898.
Según el portavoz socialista en la comisión de Agricultura, Ramón Laplana, las campañas de vacunación «no tienen ningún coste para el Departamento de Agricultura, ya que aun siendo obligatoria la paga el propietario del perro». Y estas vacunas tienen un coste al ser inyectada por veterinarios que oscila entre los siete y los 30 euros. Según datos de fuentes socialistas, se pueden recaudar anualmente hasta tres millones de euros.