La Fundación Artemisan y la Federación de Caza de Castilla y León han interpuesto una querella ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo contra tres magistrados de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ( Valladolid), a los que considera responsables de un presunto delito de prevaricación judicial.
Para Artemisan y la Federación de Caza –y tal y como explica el voto particular del cuarto magistrado que discrepó de la decisión emitiendo un voto particular- la decisión de los jueces de no admitir el desistimiento a un recurso de reposición interpuesto por la letrada de la Comunidad no tuvo sustento jurídico real, sino que se hizo con la finalidad última de poder plantear una cuestión de inconstitucionalidad ante el Tribunal Constitucional contra la recién aprobada Ley 9/2019, de 28 de marzo, de modificación de la Ley 4/1996, de 12 de julio, de Caza en la Comunidad Autónoma de Castilla y León. Es decir, que se habrían tomado decisiones ajenas al procedimiento judicial con el objetivo de perjudicar al sector cinegético.
Según explica la querella de Artemisan y de la Federación de Caza, el rechazo al desistimiento de la letrada de la Comunidad no tiene soporte jurídico. Por eso, entienden que se produjo una “prevaricación judicial de naturaleza procesal manifestada directamente en los autos de inadmisión del desistimiento y por alcance, porque supondría un evidente exceso de jurisdicción, en el auto de 11 de noviembre de 2019”.