Poner en marcha una asociación cuesta y mucho, más si hablamos de una Autonomía como la nuestra, nueve provincias, en un amplio territorio, con diferencias en su configuración geográfica muy importantes y una forma de entender la caza diferente según sea el lugar donde la practicamos.
El atravesar momentos difíciles para la rehala y su mundo, lleva a un grupo de propietarios de la provincia de Soria a reunirse para hablar de las consecuencias nefastas que se ciernen en este momento y acuerdan crear una asociación que defienda sus intereses ante la Administración y sus regulaciones, recupere el sentido más puro de las tradiciones y centre el trabajo de las rehalas en nuestra Autonomía, consiguiendo un status que actualmente no tiene.
En la actualidad, la forman ciento cinco socios, cifra muy significativa dado que aún se está extendiendo la asociación por todas las provincias de C y L. El núcleo principal de los socios actualmente se concentra en la provincia de Soria con miembros de Segovia, Burgos, Palencia, Valladolid y de provincias afines a nuestra Comunidad, como Zaragoza, La Rioja, Álava y Navarra.
Así mismo, se encuentra Federada, contando con la colaboración de la Federación de Caza de Castilla y León, para con su colaboración y a través de los Órganos Federativos pueda llegar hasta los últimos rincones oficiales del Gobierno Autonómico, formando parte de las comisiones negociadoras de convenios relacionados con nuestra actividad, destacando las ya realizadas con Sanidad Animal, dirección General de Medio Ambiente y secretarias de Medio Ambiente y Sanidad.
Nuestros objetivos principales son:
- La defensa de la caza y su cultura.
- Proteger los legitimos intereses de los propietarios de rehalas de Castilla y León.
- Participar, a través de sus representantes, en las decisiones de los Consejos de caza Regionales.
- Exigir de las administraciones un trato ordenado y equilibrado en las normas administrativas que son de obligado cumplimiento para los dueños de las rehalas: núcleos zoologicos, microchip, vacunas, residuos solidos, zonas de recreo, servicios, etc.
- Fomentar el asociacionismo entre los dueños de rehalas de Castilla y León, animando a las jóvenes promesas, a que practiquen la caza con rehala, defendiendo su pureza, contribuyendo a que esta actividad milenaria no se pierda.
- Fomentar la uniformidad de rehalas y rehaleros, acudiendo a la monteria con un número suficiente de perros (diez o doce colleras), identificados mediante divisas, cumplir los horarios de cita ,batiendo la mancha con profesionalidad, respetando las indicaciones de los organizadores de las monterias.
- Defender el trabajo bien hecho de los rehaleros en el monte, haciendose respetar.
- Defender a ultranza nuestra actividad como deportiva, rechazando la definición oficial de animales de producción en la cual nos han incluido.
- Demandar formar parte de cualquier negociación previa, ante cualquier cambio normativo autonómico o nacional que pretendan nuestros Gobiernos.
- Formar y orientar a nuestros asociados en todas las materias o disposiciones que fomente la Administración.
Conseguir ser escuchados es de por sí importante y si, además, lo hacemos con los argumentos de nuestra fuerza asociativa, es razón suficiente para hacer llegar nuestra voz sólidamente ante la administración y hacerles transformar un proyecto o una ley de imposible cumplimiento como la actual en algo factible que se adapte a las nuevas formas de estos tiempos.
Primero, dialogo entre los miembros de esta Asociación, manteniendo las buenas relaciones entre todos, para saber las demandas de cada cual, informando a tiempo de los problemas que surjan es esencial para el desarrollo de ARRECAL. Los socios de ARRECAL tienen, no solo la obligación sino el deber de cazar bien, manteniendo las tradiciones de la rehala Española y sus monteros, exigiendo a los organizadores, tradición y respeto por esta caza tan nuestra y autentica, por ser la parte más noble de la montería y la más sacrificada en recursos económicos y personales.
Asociación Regional de Rehalas Castellano- Leonesas.